Anna Milazzo con su perra Maia

Maia

Anna Milazzo nació en Aidone, Provincia de Enna, Italia. Cuando tenía un año emigró con su familia al Uruguay donde vivió hasta 1972. En diciembre de ese año, después de haber sido secuestrada por las Fuerzas Armadas y haber sufrido prisión y tortura, logró regresar a Italia. El exilio significó para ella, por un lado, una laceración profunda, por otra un encuentro entre dos culturas y dos lenguas de igual dignidad y riqueza. Estudió Psicología en Uruguay y se graduó en Italia, obteniendo más tarde la especialización en pedagogía. Amnesty International de Italia ha publicado una novela suya que constituye un testimonio del oscuro período vivido en Uruguay: Anahí del mare, Infinito Edizioni, 2012. En 2008 publicó un relato y algunos poemas dentro de una recolección de escritos de varios autores del laboratorio Grafio Laboratorio Forme 1, coordinado por Gianni Casconi y Paola Rosati y publicado por Attucci Editori.

Selección de poemas para Aurora Boreal® por Anna Milazzo.

Percepisco la tua presenza, piccola mia, il tuo odore, il suono del tuo respiro. Ci ingegnavamo perché diventasse un suono caldo, un respiro condiviso, un soffio da coltivare come un fiore. Se ne andrà, svanirà. Mai del tutto. Il fiore è lieve, impreciso, indelebile e perenne. Tu fiorirai, piccola mia, quando il mio corpo sarà appassito e ti inclinerai sul mio corpo per germogliare dal sale della terra che sono i morti. I tuoi petali avranno il mio sale e la brezza le alzerà in volo. Torneremmo a scorrazzare per i prati, a nuotare nelle acque rigogliose di un ruscello. Questo sarà il nostro paradiso. Attendimi, cercami, con insistenza e chiamami, BAU! (ANDIAMO A GIOCARE?)

Percibo tu presencia, mi chiquita, tu olor, el sonido de tu respiración. Nos ingeniábamos para que se volviera un sonido cálido, una respiración compartida, un soplo para cultivar como una flor. Se irá, se disipará. Pero nunca del todo. La flor es leve, imprecisa, indeleble y perenne. Tú florecerás, mi chiquita, cuando mi cuerpo se habrá marchitado y te inclinarás sobre mi cuerpo para renacer de la sal de la tierra que son los muertos. Tus pétalos tendrán mi sal y la brisa los levantará en vuelo. Volveremos a correr por los prados, a nadar en las aguas airosas de un arroyo. Éste será nuestro paraíso. Espérame, búscame, con insistencia y llámame, GUAU! (¿VAMOS A JUGAR?)

 

 

 

Piccola anima mia

 

Il tempo passa, lo lascio andare.
Il nostro tempo l'ho stretto,
morsicato,
assaporato,
spolpato
anche nel più piccolo istante
del suo midollo.
Ora, lui si vendica
Come un macigno
rovesciato su di me
mi inghiote,
mi spolpa,
mi macera.
I miei risvegli sono stanchi,
vuoti capogiri di tristezza.
Amo il dolore della tua assenza,
lo riscaldo,
lo ravvivo
con il tuo soffio che ho fatto mio,
prima di dirti addio.
Sei cenere aerea,
argentea,
sul filo dell'acqua
accendi scintille.
Chiami ceneri più antiche
Mescolate in un soffio
accendete il fuoco,
torna il gioco.

 

Mi pequeña alma

 

El tiempo pasa, lo dejo ir.
El tiempo nuestro lo apreté,
lo mordí,
lo saboreé,
desencarnado
hasta en su más mínimo instante
de su médula.
Ahora, él se venga.
Como un pedernal
arrojado sobre mí
me devora,
me descarna,
me consume.
Mis despertares son fatigosos,
vacuos mareos de tristeza.
Amo el dolor de tu ausencia,
lo caliento,
lo rreavivo
con tu aliento que hice mío,
antes de decirte adiós.
Eres ceniza aérea,
plateada,
sobre la superficie del agua
enciendes chispas.
Convocas cenizas más antiguas
Mezcladas en un soplido
encienden el fuego,
vuelve el juego.

(traducción de Martha Canfield)

 

anna maia 375Selección de poemas por Anna Milazzo para Aurora Boreal®. Material enviado a Aurora Boreal® por Martha L. Canfield y Anna Milazzo. Foto de Maia con Anna Milazzo© cortesía archivo privado Anna Milazo. Foto Maia © cortesía archivo privado Anna Milazzo.

 

 

 

Suscríbete

Suscríbete a nuestro boletín y mantente informado de nuestras actividades
Estoy de acuerdo con el Términos y Condiciones